Esta diferencia se basa en el cambio lingüístico que se produce en el prefijo para ir a perjuicio como un daño que lleva a una intervención judicial, mientras que prejuicio hace referencia a un daño moral causado por el prejuzgamiento de otro.
Prejuicio
Es el juicio previo que se tiene de una persona, causa daños personales o morales a la persona afectada. Se compone del prefijo pre- que se refiere a algo previo.
Perjuicio
Se compone del prefijo per- que se refiere a una acción completa. En este caso, el perjuicio es una acción que causa un daño profundo que exige un juicio.
Actualmente se usa la palabra prejuicio para hacer referencia al juicio previo que una o varias personas que tienen sobre otra persona o grupo inducido por estereotipos que conlleva a la discriminación y al racismo; y perjuicio se trata de un daño comprobable y visible de una persona o grupo a otra persona.
Ambos vienen de la palabra latina praeiudicium, que representa el primer juicio o interrogatorio antes de un juicio, o sea, un pre-juicio.
El cambio en los prefijos empieza a ser observado cuando los romanos Cicerón y Séneca comienzan a utilizar praeiudicium no solo para referirse al juicio previo de un daño material, sino al daño moral del presuponer o de la presunción de un delito a alguien dañando por su posición social.