Ello, yo y superyó son instancias creadas en la psique humana relacionado con la teoría de la personalidad desarrollada por Sigmund Freud en sus estudios sobre el psicoanálisis.
Ello
Es el componente innato de los individuos y las personas nacen con él. Consiste en los deseos, voluntades e instintos principalmente provenientes por el placer. Desde ahí se desarrollan las otras partes que forman la personalidad humana: yo y superyó.
Yo
Se crea a partir de la interacción del ser humano con su realidad, ajustando sus instintos primitivos (el ello) con el ambiente en que vive. También es el mecanismo responsable por el equilibrio de la psique. Busca regular los impulsos del ello, al mismo tiempo que intenta satisfacerlos de modo menos inmediato y más realista. Gracias al yo la persona logra conservar la cordura de su personalidad. El yo se desarrolla en los primeros años de vida de la persona.
Superyó
Se da luego del yo y consiste en la representación de los ideales y valores morales y culturales de una persona. El superyó procede como un (consejero) para el yo, alertándolo sobre lo que es o no moralmente aceptado, según los principios que fueron extraídos por el sujeto.
El superyó se da a partir del quinto año de vida, es aquí cuando el contacto con la sociedad comienza a aumentar por medio de la escuela, por ejemplo. En este momento las relaciones sociales pasan a ser mejor interpretadas por el ser humano.